Pilar García Jiménez
Soy Pilar García, nací en el mes de marzo de 1951 en Aldea del Rey Niño, un pequeño pueblo de la provincia de Ávila (España), en el seno de una numerosa familia cristiana de doce hermanos, donde yo ocupo el quinto lugar. Mis padres Mariano García de Blas y Constantina Jiménez eran sencillos y buenos cristianos, intentaron educar a sus hijos en la fe cristiana e inculcarles el sentido del deber, el respeto, el amor, la verdad y la honestidad. Hice mi primera comunión y fui confirmada el mismo día, a los ocho años de edad. Ese mismo año nos fuimos a vivir a Ávila capital, donde fui al colegio de Santa Teresa de Jesús hasta los doce años. En el colegio tuve la suerte de estar cercana a una religiosa Teresiana del Padre Poveda, la señorita Catalina, quien con su estilo de vida y su entrega a la educación influía en mí de un modo callado; invitándome a colaborar con ella en actividades extraescolares, pues nunca me dio clase. Los años de mi infancia fueron muy normales, me sentí querida y cuidada. No crecí en la abundancia sino en la austeridad, aunque éramos muchos en casa y había que repartir nunca me falto el cariño del hogar. Fue ahí donde, sin yo saberlo, se comenzó a forjar mi espíritu para la entrega, el compartir, el agradecimiento, el desapego… lo que después ha sido mi vida de entrega a Dios a través de la Hospitalidad.
Seguir leyendoLorenza Toledo Silangan
Nací el 5 de septiembre de 1963 en el municipio de Oslob (Cebu, Filipinas). Mi padre es José Silangan, de profesión carpintero y muy devoto de San José. Mi madre, Leona Toledo Silangan, trabajaba en la granja familiar y también como ama de casa. Soy la más joven de nueve hermanos, nací después de seis hermanos varones, por lo que fui el centro de atención de la familia y recibí mucho afecto y amor por parte de todos, incluso de nuestros vecinos. Lo primero de lo que fui consciente en mi familia fue de su fe sencilla, que se concretaba en la oración y devociones: rezábamos el rosario y las novenas después de cenar e íbamos a la iglesia todos los domingos. Mi padre fue mi primer catequiata, me enseñó a hacer la señal de la cruz, la oración del Ángel de la Guarda y el Padre Nuestro. Cuando aún éramos pequeños, mi madre solía dejarnos al cuidado de nuestra vecina mientras trabajaba en la granja, mis dos hermanas y hermanos mayores también trabajaban para ayudar a la familia. Ingresé en la congregación el 27 de diciembre de 1993, realicé mi Primera Profesión el 15 de octubre de 1997 y emití mi Profesión Perpetua el 20 de septiembre de 2003. Después, en 2005, me enviaron a la India.
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