Hoy, 28 de julio, se celebra la IV Jornada Mundial de los Abuelos y de los Mayores. Acompañados por el lema “En la vejez no me abandones” (cf. Sal 71,9), el Papa Francisco nos invita a reflexionar sobre la importancia de construir una sociedad que valore y cuide de sus mayores, asegurando que no se sientan solos ni olvidados.
El Santo Padre nos recuerda que los abuelos y mayores son pilares fundamentales en nuestras familias y comunidades, ya que son portadores de una rica herencia de fe, cultura y tradiciones. Sus vidas están llenas de lecciones valiosas que nos ayudan a navegar nuestros propios caminos. Son testigos vivos de la historia y maestros de vida que nos enseñan con su ejemplo de entrega y fortaleza.
Al valorizar su rol vital en nuestra sociedad, la celebración de la Jornada quiere fomentar el compromiso de toda la comunidad eclesial en la construcción de vínculos entre generaciones y en la lucha contra la soledad. Es una verdadera oportunidad para agradecerles por su inestimable contribución y para renovar nuestro compromiso de estar presentes en sus vidas.
Desde Hermanas Hospitalarias nos unimos al llamado del Santo Padre a, mediante la oración y el servicio hospitalario en nuestros centros, contribuir a la salud y el bienestar de los adultos mayores, y pedimos fortaleza para cuidar de ellos con el amor y respeto que merecen.
