El 2 de agosto conmemoramos el 127º aniversario del fallecimiento de Sor María Angustias Giménez Vera, fundadora de la Congregación de las Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazón de Jesús. Su historia nos inspira a ser instrumentos de amor y sanación para el mundo, una misión que renovamos en el XXII Capítulo General bajo el lema “Revestíos de sentimientos de misericordia”, para ser “signos proféticos de esperanza y de la cercanía de Dios a la humanidad que sufre”

Un poco de su historia

María Angustias nació el 21 de agosto de 1849 en Granada, España, en un hogar profundamente cristiano. A los 22 años, conoció a María Josefa Recio, con quien desarrolló una amistad inseparable y una búsqueda compartida de Dios, guiadas espiritualmente por San Benito Menni.

En 1880, ambas dejaron Granada y se dirigieron a Ciempozuelos (Madrid, España) para unirse a nuestro padre fundador y establecer las bases de nuestra congregación, respondiendo a la necesidad de atender a las mujeres con enfermedad mental, un sector desatendido y marginado de la sociedad. El 31 de mayo de 1881, María Angustias tomó el hábito bajo el nombre de Sor Corazón de Jesús y comenzó su noviciado junto con otras 10 jóvenes, quienes se convirtieron en las primeras Hermanas Hospitalarias. Tres años después, en 1885, realizó su profesión perpetua.

Su legado

El 2 de agosto de 1897, María Angustias falleció en San Baudilio de Llobregat (Barcelona). Sus restos reposan en Ciempozuelos junto a los de San Benito Menni y María Josefa Recio. Aunque vivieron en el siglo XIX, su sencillez de vida y profundidad de espíritu siguen enseñándonos mucho en el siglo XXI.

Dejémonos sorprender e interpelar por el testimonio de Sor María Angustias Giménez Vera, y que su ejemplo nos acompañe en nuestro compromiso de ser respuesta hospitalaria ante un mundo que sufre.

Marketing Digital. Este proyecto ha sido desarrollado por Grupo Enfoca: Diseño web Alicante