Buenos días.
Llegamos al quinto domingo de Cuaresma, últimas celebraciones previas a la Semana Santa, ya cercanas al Domingo de Ramos.
Este último domingo de Cuaresma insiste en presentarnos a un Dios que siempre es capaz de actuar de modo novedoso: abre ante el pueblo exiliado en Babilonia un camino de libertad en medio del desierto; cambia la suerte del salmista; empuja a Pablo hacia una meta de perfección que le será dada tras la resurrección de los muertos; da una nueva oportunidad a la mujer adúltera y le regala un futuro de libertad y plenitud.
Ánimo y aprovechemos esta última etapa de Cuaresma.
¡Feliz semana!
Con música sabe mejor…