El cuidado de los adultos mayores es un compromiso que queremos reafirmar, poniendo siempre a la persona en el centro de los servicios que ofrecemos. En esta labor, es fundamental el trabajo y la entrega hospitalaria de nuestros colaboradores, que día a día comparten su calidad humana y profesional en nuestros centros.
En esta ocasión os compartimos el testimonio de María, coordinadora de actividades en San Agustín, perteneciente a la Provincia de Inglaterra. En esta residencia ofrecemos atención residencial las 24 horas del día a 52 ancianos, algunos de los cuales viven con demencia u otras enfermedades relacionadas. Leamos su testimonio:
¿Cómo te llamas y cuál es tu papel en las Hermanas Hospitalarias?
Me llamo María y soy coordinadora de actividades en San Agustín (Addlestone)
¿Qué importancia tienen las actividades recreativas y sociales para las personas mayores en los centros?
Son muy importantes, la salud lo es todo como sabemos y la salud mental es una parte clave de la salud que no se puede olvidar. Las actividades recreativa
s y sociales pueden aliviar el aburrimiento, mejorar la salud mental y ayudar a los residentes a hacer frente a los síntomas de la
demencia. Si se incluyen actividades que les mantengan en movimiento, les hagan pensar y les hagan sonreír, su salud puede mejorar durante más tiempo y ralentizar el deterioro.
¿Puede describir algunas de las actividades más populares entre los residentes?
La actividad más popular que organizo es un día de cine (de películas que recuerdan de cuando eran más jóvenes) cada dos semanas, en el que se decora toda la sala, se pone música temática y los residentes se visten con disfraces temáticos. Luego organizo juegos y concursos temáticos. Me parece que ese día se dispara el compromiso de todos los residentes, desde los que tienen pocas necesidades de apoyo hasta los que tienen muchas, todo el mundo participa.
¿Cómo planifica y selecciona las actividades para las personas mayores?
Me fijo en sus necesidades y capacidades. Para algunos son apropiadas las actividades basadas en los sentidos, para otros las basadas en la memoria, como nombrar un nombre que les interese y les haga participar, muchas competiciones de juegos físicos son las que les hacen participar y pueden animarles. No hay dos grupos de residentes iguales, por lo que intento hacer tres actividades al día, además de clases individuales, para garantizar la máxima participación.
¿Cómo influye el carisma hospitalario de la congregación en el diseño y la realización de las actividades diarias para las personas mayores en los centros?
Las hermanas siempre están dispuestas a dar ideas y a ayudar, pueden ayudar a involucrar a más residentes a la vez y nunca tienen miedo de «parecer tontas», ya que a menudo es lo que se necesita para involucrar a los residentes.
¿Qué impacto ha observado en la salud mental y física de los residentes como resultado de estas actividades?
Parecen más alegres y felices cuando entró en la sala, ya que están deseando saber qué actividades voy a organizar a continuación. En las actividades físicas he notado que han mejorado su confianza y su fuerza en estos juegos. Siempre preguntan cuál será el próximo día de cine y están deseando que llegue.
¿Puede compartir algún caso de éxito en el que una actividad haya tenido un impacto significativo en un residente?
En mis charlas individuales con una residente en particular, con la que hablo todos los días que estoy de turno, me he dado cuenta de que cuando iba por primera vez podía obtener una respuesta de sí o no en toda la conversación, pero ahora, después de unos meses, es capaz de hablarme con frases completas durante toda la conversación. Ha sido maravilloso ver cómo aumentaba su confianza y su vocabulario.
¿A qué retos te enfrentas en el centro y qué herramientas o recursos utilizas para superarlos?
Los retos a los que me puedo enfrentar pueden ser la reticencia a participar en algunas actividades, así que organizo las actividades en el centro del espacio donde todos puedan verlas y consigo que participen tantos como sea posible (aunque solo sean 3). Empiezo la actividad con ellos y a medida que los demás se divierten los veo mirar, después de unos minutos los invito a la actividad de nuevo, muchas veces su respuesta cambia a que les gustaría unirse, puedo conseguir que muchos más residentes participen utilizando este método.
¿Qué recomendaciones daría a otros centros que quieran mejorar sus programas de actividades para personas mayores?
No hay dos centros iguales, cada grupo de residentes es diferente, hay que probar y equivocarse con las actividades, adaptarlas a sus necesidades, no tener miedo a que las actividades parezcan un poco ridículas y no tener miedo a hacer el ridículo. Déles algo que les haga ilusión y divídales el tiempo para que no se sientan atrapados en un bucle sin fin de lo mismo. Mezcla las cosas. Busque en Internet ideas nuevas e interesantes. Y habla con tus residentes, ellos ya saben lo que les gusta si les escuchas; habla también con sus familias, ellos saben lo que le gusta o le gustaba a esa persona, aunque ni ellos mismos lo recuerden.