Sor Anabela Carneiro, Superiora general, felicita la Navidad a toda la Comunidad Hospitalaria a través de un saludo de Alegría y Paz.
Mensaje a toda la COMUNIDAD HOSPITALARIA. Navidad 2017
“Parecernos a la Navidad…”
Se acerca la celebración de la Navidad, y una vez más yo me acerco a todos/as vosotros/as para enviaros mi saludo de Alegría y Paz y desearos ¡FELICES FIESTAS DE NAVIDAD!
Os escribo desde Dapaong (Togo), recién terminado el II Encuentro Hospitalarias de África, donde nos hemos reunido con hermanas de las distintas presencias hospitalarias en este continente. Con este mensaje, os comparto la foto de una de nuestras hermanas que, en el Hospital de niños Yendube, dedica su vida, junto con tantos otros miembros de la Comunidad Hospitalaria, en la asistencia a los niños prematuros y desnutridos.
Viendo de cerca la realidad de estos pueblos, tanto en los niños del Hospital y otras estructuras asistenciales, como en las calles de las diferentes poblaciones por donde hemos pasado, me venía muchas veces aquella frase de S. Benito Menni que, escribiendo a las hermanas con ocasión de la Navidad les decía: “Jesús ha nacido, pobre y humilde en el Portal de Belén… Contempladle y escuchadle dentro de vuestros corazones”
Jesús nace pobre y humilde… lo representamos en los creativos belenes que, estos días, se multiplican en las diferentes estructuras de la Obra hospitalaria, en nuestras casas, en nuestras iglesias y, en algunos países, hasta en lugares públicos… lo representamos así: pobre y humilde, con símbolos e imágenes sencillos, que evocan espontáneamente, un aire de familia, de ternura, de armonía, de paz.
Os invito a que todos los que formamos la Comunidad Hospitalaria a contemplar y a escuchar en el corazón el misterio/don que celebramos.
Para los que sois creyentes, la Navidad es la celebración/actualización de la presencia de Dios, infinitamente misericordioso que, por amor, asume nuestra humanidad para “regalarnos” en su Hijo Jesús, el don de la salvación, el don de la comunión con Él y con nuestros hermanos, el poder hacer la experiencia de sentirnos hijos e hijas amadas de Dios, hermanos y hermanas en amistad con los demás.