Investigadores de FIDMAG Hermanas Hospitalarias, hallan la zona cerebral responsable de las alteraciones motoras en la esquizofrenia.
Un grupo investigador de la Fundación para la Investigación y Docencia María Angustias Giménez (FIDMAG), de Hermanas Hospitalarias, ha realizado un estudio que señala que la DT se asocia con un cambio estructural en el cerebro de las personas que la sufren. Este trabajo, que ha sido publicado en la revista British Journal of Psychiatry, tiene especial relevancia debido a que se trata del primer estudio de discinesia tardía realizado con técnicas avanzadas de neuroimagen.
Según el doctor Salvador Sarró, psiquiatra e investigador de FIDMAG Hermanas Hospitalarias y uno de los autores del artículo, este hallazgo “desmonta la hipótesis de que los síntomas de la discinesia tardía son un mero reflejo de los efectos neuroquímicos de los antipsicóticos, ya que son la consecuencia de un cambio en la morfología del cerebro”. De hecho, los responsables del estudio consideran que los resultados de la investigación se deberían tener en cuenta a la hora de desarrollar nuevos fármacos antipsicóticos.
En la investigación participaron 81 personas con esquizofrenia de distintos dispositivos asistenciales de las Hermanas Hospitalarias. El equipo liderado por la doctora Edith Pomarol-Clotet examinó y comparó, mediante una prueba de resonancia estructural, el cerebro de 32 pacientes con discinesia tardía con 49 sin esta alteración. También se incluyeron 61 controles sanos. En este sentido, el estudio muestra que los pacientes con este síndrome presentan reducciones en el volumen de la sustancia gris, a nivel predominantemente subcortical, localizadas en mayor medida en el núcleo caudado. También se constata que el volumen de los ganglios basales del grupo de pacientes con DT es menor, hecho que señala una pérdida de tejido asociada con el fenómeno. Tras los resultados obtenidos, los investigadores de la FIDMAG pretenden seguir con la línea de investigación en curso sobre la discinesia tardía.