El Centro Telema, centro sociocomunitario de las Hermanas Hospitalarias en la República Democrática del Congo, ha sido noticia este último mes en diversos medios por su enorme labor en Kinshasa, en donde brinda atención y apoyo a personas afectadas por problemas de salud mental en la región. Este centro es uno de los más de 85 centros sociocomunitarios de Hermanas Hospitalarias en todo el mundo que ayudan a que anualmente alrededor de 820 mil personas puedan abrazar su sufrimiento y encontrar sentido al dolor.
En los últimos días, la Congregación de Hermanas Hospitalarias ha visto una mayor visibilidad en medios como EFE, Vatican News, Infobae, QuéPasa Media Network, Alfa&Omega, Infobae, entre otros, gracias al compromiso y dedicación de las Hermanas de nuestra Congregación, entre las que se encuentra la española Sor Ángela Gutierrez, en uno de los mayores centros sociocomunitarios del continente africano que cada día asiste a “quienes nadie quiere”.
A través de este enorme proyecto hospitalario, la Congregación ha logrado mejorar la calidad de vida de muchas personas en la región, brindando servicios y apoyo psicológico a personas afectadas por problemas de salud mental, a sus familias y a la comunidad en general. Como resalta la periodista Cristina Cabrejas para EFE en la entrevista a Sor Ángela Gutiérrez y la Superiora Sor Alina Lyna Kana, “Télema, que significa «Levántate», porque eso es lo que ellas hacen, «levantar a quienes dejan tirados por las calles de Kinsasa», tiene dos sedes en la capital y se ha convertido en un referente en el tratamiento de las enfermedades psiquiátricas.”
El centro sociocomunitario cuenta con un equipo de profesionales de la salud mental, que brinda atención a personas afectadas por depresión, ansiedad, trastornos de alimentación, entre otras afecciones. Además, la Congregación ha implementado programas de prevención y sensibilización sobre la salud mental, con el objetivo de promover una mayor conciencia y comprensión sobre la importancia de cuidar la salud mental en la zona. Asimismo, como explica Infobae en su nota, “han montado un taller de costura para que estas personas que nadie quiere solo por tener un problema mental puedan aprender a coser y ganarse la vida.”
Las diversas organizaciones y medios han reconocido el enorme trabajo de las Hermanas Hospitalarias destacando su compromiso, dedicación, profesionalidad y humanidad en la lucha contra los problemas de salud mental en África. Como describe en su artículo de opinión “Las manitas de África” la periodista Ángeles Condes Mir las Hermanas Hospitalarias “tejen, en sentido literal y figurado, un mañana para las personas con enfermedades mentales. Las manos de estas escarban en la basura de esa inmensa ciudad para llevarse algo a la boca. Las manos de ellas lavan sus cuerpos, alivian sus llagas y apaciguan sus mentes quebradas por tanto sufrimiento en el centro Télema”.
Acusados de estar poseídos por los malos espíritus, los enfermos mentales de Kinshasa acababan abandonados en la calle hasta que abrió el centro “Télema” en el barrio de Kimtambo, “Los ves tirados en las calles, entre la basura. El Gobierno, la familia les han abandonado porque consideran que tienen malos espíritus…, en África nadie comprende lo que es un trastorno mental. Pero aquí se les recupera y con el trabajo que realizan se sienten valorizados”, explica Sor Alina, superiora de la Congregación en el Congo.
El Centro Télema es solo uno de los 85 centros sociocomunitarios de nuestra Congregación. Desde Hermanas Hospitalarias, anualmente ayudamos a que alrededor de 820.000 personas puedan abrazar su sufrimiento y encontrar sentido al dolor en más de 25 países en todo el mundo.
Toda la Familia Hospitalaria, alrededor de 1000 Hermanas y más de 11000 colaboradores y voluntarios, estamos comprometidos con brindar una atención integral y de calidad a todas las personas afectadas por problemas de salud mental. Nuestro trabajo es una labor de amor y de compromiso con la comunidad, y estamos felices de ver que nuestra misión hospitalaria está siendo reconocida en los medios y por la sociedad en general.