Este 23 de mayo el Papa Francisco recibió a nuestra nueva Superiora general junto al nuevo Consejo general y las hermanas que constituyen la asamblea capitular de la Congregación, en una emotiva audiencia en el Vaticano.
Durante el encuentro, reflexionaron sobre el valor de la hospitalidad a la luz de la realidad de las personas que sufren enfermedades mentales o con discapacidad. En ese marco, el Papa comentó: “Al comienzo de vuestras jornadas hay dos historias apasionantes, en las que podemos ver cómo la audacia de fundadores y fundadoras, bajo la acción del Espíritu Santo, puede realizar grandes obras, lanzándose allí donde llama la caridad, sin hacer demasiados cálculos, con la «santa locura del amor». Y si falta el amor, ¡estamos acabados!”
La nueva Superiora general de la Congregación, hermana Idília Maria Carneiro, agradeció la escucha, el ánimo y el acompañamiento del Santo Padre y destacó: “Hemos compartido un momento muy emotivo, muy bonito. El Papa nos ha acogido con su sonrisa. Le he pedido la bendición para la Congregación, especialmente, por esta nueva etapa de servicio con personas con enfermedades mentales y discapacidad”.
También reveló que compartieron un lindo momento cuando le entregaron al Papa un regalo preparado por un grupo de niños de la Fundación Purísima Concepción de Granada. “Realmente fue un momento muy divertido, porque el regalo representaba las distintas etapas de la vida del Papa. Fue ahí cuando Francisco al ver la representación de él mismo preguntó: “¿Este soy yo?, “Bien hecho, muy bien”.
¡Falta poco para que finalice el Capítulo General! Este 26 de mayo se realizará una misa de clausura que abrirá paso hacia un camino renovado de Hospitalidad en favor de las personas con sufrimiento psíquico, acompañadas por la bendición de Francisco.